Las películas son la forma de entretenimiento más masiva que existe y siempre nos estamos dejando llevar por lo que vemos allí: cómo deberían ser las relaciones, los trabajos, las personas, etc.. Cuando no ves lo que eres, sientes que casi no existe. Y es verdad, la traducción es una profesión muy poco valorada. No digo que porque no salga en las películas que nadie sabe de su existencia, pero sí se sabría más sobre la profesión si fuese más masiva. Partamos de la base de que la mayoría de las personas no entienden muy bien lo que hace un traductor. Basta con revisar Twitter durante la temporada de premios; siempre se confunde a los intérpretes con los traductores. He tenido que leer cosas como “saquen a los traductores, molestan”. En las películas, pasa lo mismo. ¿Cuántas veces he tenido que corregir a un guionista cuando cambian el nombre de la profesión. Por ejemplo:
En “Inglourious Basterds”, el personaje de Wicki es un soldado que a veces debe interpretar a los alemanes cuando son interrogados por los estadounidenses; momentos antes, el personaje de Brad Pitt dice que alguien puede “traducir”. No, Wicki no tiene que escribir nada. La molestia pasa en la escena siguiente, cuando la técnica de enfocar rápidamente al personaje que está hablando se hace presente, ya que así es el proceso de interpretación: hablar, entender, decirlo en otro idioma, de inmediato. Wicki no es el único intérprete en esta película, ya que también tenemos a Francesca; ella sí es presentada como una intérprete. Es hermoso verlos en acción y es hermoso que una película tenga varios idiomas para admirar. También hay otros intérpretes reconocidos como tal, por ejemplo: Nicole Kidman en “The Interpreter”, Audrey Hepburn en “Charade” o el soldado Upham, en “Saving Private Ryan”. También tenemos a aquellos que no son profesionales, como Danny Archer en “Blood Diamond”, la pequeña de “Spanglish”, la señora de “Airplane!” o los tipos de “Zero Dark Thirty”. Pero, ¿dónde están los traductores? Confundidos con los intérpretes.
Honestamente y, si la memoria no me falla, he visto a dos traductores en el cine. Lo malo es que exista muy poca representación, pero lo bueno es que ambos personajes son mujeres. La primera traductora es Evelyn de “The Mummy”, una bibliotecaria capaz de leer textos en egipcio y traspasarlos al inglés. La segunda traductora es Vittoria de “L’eclisse", una italiana que traduce del inglés al español. El único detalle es que ambas películas no se centran tanto en la carrera de traducción como quisiéramos. Nos confunden de profesión, no nos pagan bien y, cuando por fin aparecemos en películas, ni la profesión puede lucirse.
Espero que algún día exista una película sobre la traducción, que tomen la historia de San Jerónimo y la traducción de la Biblia o la de aquellos traductores a los que la Iglesia perseguía y mataba si es que traducían “la joven María” en lugar de “la virgen María” o a aquellos traductores más modernos que tuvieron que arreglárselas con Shakespeare, Austen, Dickens e incluso con J.K. Rowling. Ojalá poder ver a más personas que compartan mi profesión en las películas. Por el momento, me conformo con ver a aquellos intérpretes ya mencionados.
Feliz día de la traducción ✌